¿Qué material de protección debes usar?

Enviar un paquete correctamente supone que, durante su transporte, la mercancía no sufra ningún desperfecto. Por eso es tan importante que optemos por un buen embalaje de protección, para que el encargo llegue a su destino en perfecto estado de conservación.

El material de protección profesional está fabricado para garantizar la integridad de la mercadería durante su tránsito y manipulación. En este contexto, el material de relleno de protección es, principalmente, un envoltorio de transporte.

Dentro de las industrias que usan estos elementos de protección tenemos la farmacéutica, la alimentaria, la informática, la textil y muchas más. Y los materiales más usados para proteger los elementos son papel, cartón, plástico y madera.

¿Qué materiales de protección podemos usar?

La función principal de los materiales de protección es evitar el deterioro de la mercancía. Podemos encontrar para tal fin diversos tipos de material para embalaje. A continuación, mostramos los más importantes.

Plástico para embalaje

El plástico puede deformarse sin llegar a la rotura, propiedad que lo hace un producto idóneo para proteger objetos delicados.


Plástico de burbuja

El plástico de burbuja es flexible, ligero e incoloro. Su forma esférica llena de aire le otorga una protección de gran rendimiento al producto, y absorbe los posibles impactos del transporte. Es ideal para objetos valiosos y frágiles que pueden envolverse con facilidad. Hay diferentes tamaños de burbujas en función del material a empacar.

Chips para relleno de cajas

Su nombre hace referencia a la similitud de su forma con el snack. Se compone de un polietileno expandido que sirve para rellenar los espacios vacíos de la caja de cartón. Es idóneo cuando tenemos un producto de tamaño inferior al contenedor y queremos protegerlo de posibles choques.

Film de espuma

El film de espuma está fabricado en polietileno muy ligero, higiénico y flexible. Viene en rollos y podemos utilizarlo para proteger las superficies delicadas. Es muy práctico para cubrir muebles, cuadros, productos electrónicos o cualquier obra de arte.

Perfiles de espuma

Su forma está diseñada para proteger y reforzar las esquinas de las cajas de embalaje. Si tenemos mercancía muy frágil, los perfiles de espuma pueden ayudarnos a proteger y amortiguar los impactos.

Papel para embalar

Embalar con papel es un método de protección de los más antiguos. Podemos usar el papel para bloquear el movimiento de los productos, separarlos o mejorar su presentación.

Cartón y papel

Son los tipos de embalaje de protección más usados en el mercado actual. Con papel y cartón podemos estabilizar, separar o envolver los productos. Son realmente prácticos, versátiles, de bajo coste y, actualmente, los embalajes más demandados. Podemos encontrar múltiples opciones en papel, en planchas de cartón corrugado o Kraft reciclado.


Ondulado o Corrugado

En el mercado vemos el papel corrugado formando una estructura sólida de hasta cinco papeles combinados. Esta forma ondulada le aporta una gran resistencia para proteger la mercadería durante el transporte.

Otros Sistemas de Protección

Existen otros sistemas como las espumas de relleno y los alvéolos con la forma del producto.

Espumas de expansión

Este tipo de producto se encuentra dentro de un recipiente a presión, con el que podemos llenar los huecos existentes en la caja de cartón. La espuma se vuelve más sólida conforme pasa el tiempo.

Alvéolo

Un alvéolo es un hueco hecho a medida para poner un producto, protegerlo y enviarlo. Los materiales pueden ser cartón, plástico o papel comprimido que luego se incorpora a las cajas (ejemplo: embalaje de fruta).

En resumen, los elementos de protección anteriormente descritos están pensados para minimizar el deterioro de la mercancía y facilitar su desplazamiento. Esto asegura que, al enviar un paquete, llegue en perfecto estado de conservación.